¿Cómo están ustedes?


No me gusta que solo se hable de los dos equipos de siempre, de esos que parten como favoritos porque tienen más presupuesto, más recursos, mejores plantillas y así cualquiera se lleva los campeonatos. Ya estamos cansados de que se coman el pastel los de siempre porque los demás también quieren su pequeña porción de la tarta. Por esto me parece bien que haya un tercero en discordia que se apunte a la fiesta.
Esta teoría sería extensible a cualquier deporte, también en el balonmano donde las escuadras más poderosas tienen más opciones de ganar. Esperemos que surja algún otro equipo osado, de esos que aparecen en un segundo plano, y  que pueda hacer frente a los conjuntos más potentes que parten con ventaja y teóricamente tienen más papeletas para llevarse el gato al agua.
 

Moraleja: La esperanza es lo último que se pierde. 

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