Mañana de museo

Después de una noche pasada por agua, llegó un nuevo amanecer con el sol haciéndose un hueco entre las nubes. Y como decía el refranero: "El sol de febrero saca al lagarto de su agujero", basta con que los rayos solares acaricien la ciudad para que las gentes se animen, salgan a las calles y se tomen sus consumiciones en las terrazas al aire libre.

Partimos a las nueve y pico del colegio, ubicado en Alcalá de Henares, para llegar a la hora señalada al museo.

Al principio los chicos van calmados pero según avanzamos, se desperezan y comienzan a animarse. Todos menos una niña que tiene mala cara, parece ser que no la sentó bien el viaje y la tengo que dar la bolsita de plástico como medida preventiva, quizás tenga razón aquella expresión de: "en martes ni te cases ni te embarques". Antes de llegar a nuestro destino, los jugos gástricos hacen su aparición... menos mal que la bolsa protectora evitó males mayores. Recuerdo en alguna ocasión como  el vómito del mareado salió disparado y ya no tuvo solución (hombre precavido vale por dos).

 

 

 

Mañana (1878)

 INNESS , George.
 

A pesar de los pesares, llegamos tempranito al Museo Thyssen-Bornemisza situado en el Paseo del Prado,8. Al entrar encontramos una placa donde se indica que fue inaugurado el 8 de octubre de 1992 para albergar una de las colecciones privadas mejores y más prestigiosas, reunidas en apenas dos generaciones y vinculadas a los nombres de Heinrich Thyssen-Bornemisza y Hans Heinrich con los mismos apellidos.

Pudimos disfrutar viendo  muchos cuadros de diferentes épocas distribuidos en las tres plantas. 

Como me resulta muy difícil nombrar tanto cuadro, sólo citaré un par de ellos con un toque onírico.

 



 

Sueño causado por el vuelo de una abeja

alrededor de una granada un segundo

antes de despertar. (1944)

DALÍ, Salvador



En este blog soñador no podíamos olvidarnos de ....



El sueño (1912)

MARC, Franz

 

Una vez terminada la visita, cogemos el autobús en el lugar indicado por el conductor y volvemos de nuevo hacia el punto de partida. Y colorín, colorado, la visita al museo ha terminado.