Hoy es viernes.
El último día laborable de la semana. Se acumula el cansancio semanal y todo el mundo está más alterado de lo normal.
Los chavales hablan mucho, no paran y tienen la cabeza en otro sitio. No están pensando en las cifras ni en las letras y sus mentes giran en torno a las actividades que realizarán en el cercano fin de semana, fuera del aula.
A pesar de los pesares me quedaré con ese agradecimiento que te dan los alumnos en forma de obsequios variados.
Un cartel con tu nombre
Una alegre sonrisa.
Una cajita con unos muñequitos quitapenas que llegó desde Guatemala.
De vez en cuando, los alumnos te sorprenden con estos grandes regalos.
Y son esos momenticos en que sabemos que todo vale la pena :)
ResponderEliminarBuen (agitado o no) finde, Manuel!
IDEM
Eliminar¡FELIZ FINDE!
Me alegro, lo celebro y te felicito, amigo. Esos preciosos regalos no tienen precio y dicen mucho y bueno de ti.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me alegro, lo celebro y te felicito, amigo. Esos preciosos regalos no tienen precio y dicen mucho y bueno de ti.
ResponderEliminarUn abrazo.
GRACIAS POR PARTIDA DOBLE.
EliminarPOR TU DOBLE COMENTARIO.
Fue sin querer como bien sabes, amigo. Así que... un "gracias" no se merece, tú lo has ganado; y el otro huelga.
EliminarFelices sueños.
Aunque pequeños regalos, son grandes si gustan al destinatario. Publicándolo en tu blog y compartirlos los hace aún más especiales y únicos, porque ni la sonrisa ni la cajita se pueden repetir. Parecidas sí, iguales no. Felicidades regaladas, y buen final de curso.
ResponderEliminarEstos pequeños-grandes regalos son muy valiosos, como los son también esos pequeños-grandes comentarios que se dejan caer por aquí.
EliminarSaludos y a seguir al pie del cañón, tanto en las letras como en las carreras.