El Estadio Olímpico que acogerá este verano las pruebas de
atletismo en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro se quedó a oscuras por un
corte en el suministro eléctrico, ocasionado por el impago de las
correspondientes facturas. El Ayuntamiento y el Botafogo, usuario de la
instalación, se echaron las culpas mutuamente.
En un comunicado, el Ayuntamiento de Río dijo que el
Botafogo es el responsable de la instalación y del pago de facturas desde mayo
del pasado año. Pero el club dijo en
otro comunicado que el consistorio municipal le adeudaba el dinero para pagar
las facturas de agua y electricidad. Según el diario Globoesporte, los impagos
ascienden a unos 200.000 euros.
Brasil, a siete meses de los Juegos, se encuentra en plena recesión
económica que ha forzado al recorte de partidas presupuestarias de la
competición para rebajar el presupuesto total en unos 400 millones de euros.
Recortes que han ido a parar a todos los campos, desde el uso de voluntarios de
pago al pago de sus comidas y transporte durante los Juegos. También se
recortaron servicios básicos en los Villa de Atletas en pasadas ediciones de
los Juegos como el número de televisores por apartamentos, e incluso llegaron a
plantearse no instalar aire acondicionado en la Villa, lo que generó una oleada
de protestas entre los comités olímpicos nacionales y acabó provocando que la
medida fuera desechada.
El estadio ahora a oscuras será la sede del atletismo y
también de algunos encuentros de la competición de fútbol. Fue inaugurado en
2007 para los Juegos Panamericanos y bautizado como Joan Havelange en honor del
ex presidente de la FIFA.
Esperemos que con el año nuevo las obras se agilicen y lleguen a buen puerto.
Supongo que lo acabarán arreglando. Pero, ¿por qué será que me resulta tan familiar esta historia?
ResponderEliminarBuena noche, un abrazo.