España cumplió con su cometido de ganar a Eslovenia en la primera fase del Mundial de balonmano femenino. Sin embargo, la victoria llegó con un premio amargo, porque Suecia derrotó a la favorita Noruega por tres tantos (31-28), y el deseo de acabar en la tercera posición para evitar a las campeonas del mundo, se convirtió por momentos en una pesadilla para España.
De esta manera España jugará el decisivo partido de los octavos de final mañana lunes en Leipzig, a las 20:30.
Ese complicado cruce parece tener un sabor amargo pero como se suele decir, los partidos hay que jugarlos. Estaremos pendientes del partido de las guerreras.
Para mí es más que complicado
ResponderEliminarBueno, hay que jugar. Esta renovada selección de guerreras ilusiona. Seguramente tampoco Noruega hubiera querido jugar con España. ¡Suerte para nuestras chicas!
ResponderEliminarAquí estaremos animando.. "Força"...
ResponderEliminarSaludos..
Lamentablemente, se cumplió el guión y el titular con ese cruce amargo se materializó.
ResponderEliminarEl equipo noruego fue superior.