Cuando empezó este Mundial, el ver a España en la final era un sueño, pero ahora es una realidad. Los Hispanos tenían las mismas posibilidades que otras selecciones que partían como favoritas, entre ellas la propia Dinamarca .
Tanto España como Dinamarca han jugado sólo una vez la final de un Mundial. España la ganó, allá por el año 2005, en aquel inolvidable Mundial de Túnez.
Dinamarca la jugó y la perdió, en 2011 ante Francia, en aquel Mundial de Suecia que no se le dio mal al equipo español, pues consiguió la medalla de bronce.
Esperemos que el Mundial celebrado en nuestro país no sea flor de un día y sirva de revulsivo para la difusión y práctica del balonmano. Para ello las diferentes Instituciones a nivel nacional, autonómico y local deberían hacer un poco más para apoyar a este bonito deporte que tantos éxitos está dando al deporte español.
Por todo esto, no es bueno quitar las subvenciones a los Clubs y Entidades deportivas que tanto hacen para difundir el balonmano desde edades tempranas.
Antes de acabar esta crónica me gustaría saludar a todos los que pasaron por este blog y nos acompañaron en cada partido, compartiendo la alegría que suponía la superación de cada ronda.
Estimados visitantes. Hoy jugamos la final de un Mundial. Y eso no pasa todos los días.
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